Yo Soy un apureño nacido en Elorza, amplio como la sabana, cálido como un atardecer veranero, fluido como el rio Arauca y reciamente refrescante como aguacero invernal. Me crié con las costumbres del llano pero también con la cordialidad andina, tierra donde viví mis experiencias juveniles y me formé como profesional y padre de cuatro hermosos y talentosos Seres, a los cuales agradezco el honor de escogerme como su padre y propagar mi estirpe. De allí que me identifique como oriundo de Elorzandes.
Agrónomo y Gerente de formación. Docente universitario jubilado, Siempre anduve en la búsqueda de nuevas experiencias y/o conocimientos sin saber que mi Yo Superior habitaba en mí desde el mismo instante de mi concepción. Independiente y visionario, desde muy temprana edad tuve que tomar mis propias decisiones y asumir responsabilidad por ellas. Me casé siendo un imberbe, apenas recién graduado y esa inmadurez me sacudió fuerte porque no supe “manejar la responsabilidad” o simplemente no supe entender muchas cosas porque no era mí tiempo. Hoy consciente que fue una experiencia que vine a vivir y honrando lo vivido y con quien lo viví, asumo la responsabilidad por los resultados.
El Universo me dio otras oportunidades y muchas veces las desperdicié por no tener definida mi visión de vida, pero en febrero 2015 conocí CRP a través de un Ser maravilloso y ¡oh, divina Creación! Comencé a darme cuenta de lo hasta ahora “oculto”. En el mes de marzo me certifiqué como Practicante y habiéndome enamorado de la filosofía, seguí la ruta del “crecimiento CRPeano” hasta certificarme como el Trainer 1239 en Junio del 2017. Desde el momento de mi primer encuentro con ésta maravillosa filosofía comencé a Reconocerme, a Amarme, a Valorarme, a Respetarme y así, progresivamente, mi entorno comenzó a Ser distinto porque comenzaron a fluir mis Creaciones. Las acciones que anteriormente y con esfuerzo resultaban medianamente exitosas, dieron paso al sentirme bien y así, solo aprendiendo a SER, mi mundo se volvió más colorido. ¿Qué hice? Nada, nada más que cambiar mi forma de percibirlo.
Hoy, tras cada día transcurrido siento mi evolución, la de mis practicantes y la de todas aquellas personas que influyo con mi Actitud. La nube oscura que ocultaba mi sol se ha disipado sin resistencia y gracias a esa luz vivificante que ahora recibo con toda su intensidad, puedo decir que vivo en Felicidad, Abundancia y Facilidad, observando lo que me gusta, consciente de lo que tengo y enfocado en lo que deseo, permitiendo a cada quien Ser como es y abierto a permitirme y transmitir el mayor Bienestar que pueda Crear.
Que nivel!!!!
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Welner fue mi docente en la universidad, lo hicimos nuestro padrino de promoción y él me hizo su amigo; aplaudo su existencia cada día, porque él es uno de mis fuertes ejemplos de inspiración...¡Gracias!